sábado, 4 de enero de 2014

¿Papillas de 8 cereales?: no hacen falta




Cuando los bebés cumplen seis meses de edad se recomienda empezar a ofrecer otros alimentos además de la leche materna (o la artificial, si fuera el caso). No es que haya prisa para que coma de todo, porque la leche sigue siendo el alimento principal, pero sí que es interesante que empiece ya a probar nuevos alimentos para empezar a conocerlos y para que, poco a poco, vaya comiendo la comida que se come en casa.
Dentro de los nuevos alimentos que se ofrecen a los niños están los cereales, que tanto pueden ofrecerse en polvo para preparar como formando parte de otros alimentos. Con esto me refiero a que un bebé que empieza a comer arroz, pasta, pan y galletas también está comiendo cereales, igual que el que toma los industriales. Pero centrándonos en estos, en los que vienen en polvo, quería hacer una simple reflexión: ¿Papillas de 8 cereales? no hacen falta.

Las papillas sin gluten

Para conocer un poco cuál es la gama de cereales más habitual que se puede comprar, os comento cuáles podéis encontrar en los comercios. Las primeras, que se dan a partir de los seis meses, pero que se pueden ofrecer a partir de los cuatro, normalmente si la madre empieza a trabajar y no se extrae leche (mejor dar cereales con agua que leche artificial, pues hay más riesgo de alergia), son los cereales sin gluten, en los que hay arroz y maíz. El arroz ya sabemos todos lo que es, un cereal sin gluten rico en hidratos de carbono muy famoso por su poder astringente. El maíz, por su parte, es también un cereal sin gluten que se utiliza para hacer harina de maíz.

Las papillas de 5 cereales

Las siguientes son las papillas de 5 cereales, que por llevar ya gluten sólo se recomiendan a partir de los 6 meses. Los ingredientes son un poco variables según el fabricante, pero lo más habitual es que sean los dos cereales de la papilla sin gluten junto a tres cereales con gluten (trigo, maíz, arroz, cebada y centeno). La idea de ofrecer estos cereales es la de hacer que el bebé ya vaya probando el gluten, un poquito cada día, para que el cuerpo vaya conociéndolo y se disminuya así la probabilidad de que sufra celiaquía.
El trigo lo podemos encontrar en la pasta y en el pan, y es mejor cereal cuando se toma integral, por contener múltiples vitaminas y sales minerales. Lacebada es un cereal que tiene como particularidad que se digiere estupendamente. El centeno se utiliza para hacer harina, y con ella hacer pan de centeno, que es más oscuro que el habitual, que contiene más fibra que la harina de trigo pero que, por contra, contiene menos proteínas.

Las papillas de 8 cereales

Finalmente llegan las protagonistas de esta entrada. Muchos padres creen que estas son las papillas definitivas, algo así como el tipo de cereales que todo bebé tiene que acabar comiendo para hacerlo bien. Algo así como una secuencia: primero las de dos cereales, luego las de cinco y finalmente las de ocho cereales.
Los ingredientes de las papillas de ocho cereales son: trigo, maíz, arroz, cebada, centeno, mijo, sorgo y avena. La avena es un cereal difícil de digerir cuya asimilación mejora al comerse en copos o, en este caso, en polvo. Es una buena fuente de proteínas (que lo han hecho famoso en el mundo del culturismo y las dietas) y es rico en minerales. El mijo, por su parte, es uno de los que más energía aportan, contiene hierro y magnesio y también puede ser tomado por los celíacos, pues no lleva gluten. El sorgo tampoco tiene gluten y es un cereal que en nuestro medio suele utilizarse para alimentar al ganado, pues a nivel nutritivo es un poco inferior a otros cereales. En los países pobres se consume mucho, pues su plantación es muy resistente a condiciones ambientales adversas.

Por qué es indiferente que tomen unas u otras papillas

Es posible que os acabe de describir cereales cuyo nombre no conocíais, e incluso cereales que ni siquiera sabíais que existían. Es normal, porque no los consumimos habitualmente. Por eso es indiferente que a un bebé le demos papilla de 5 cereales o papilla de 8 cereales, porque la papilla de 8 cereales contiene cereales que un niño no consumirá nunca más.
Como la idea es que le demos comida de la nuestra para que vaya aprendiendo a comer comida normal, no tiene mucho sentido que demos mijo, sorgo, centeno y cebada a un niño, si cuando deje las papillas no va a volver a probar estos cereales. No es que sea malo, que no lo es, es simplemente algo que puede ser interesante para los padres, sobre todo si, a la hora de ir a comprar las papillas, las de 8 cereales tienen un precio superior a las de 5 cereales.

2 comentarios:

  1. Hola!!! Soy la autora de Mamá de un Survivor! Te he otorgado un premio por tu blog: Es el premio LIEBSTER AWARDS. Enhorabuena por tu blog y a seguir escribiendo!! Puedes ver el premio en http://mamadeunsurvivor.wordpress.com/2014/01/09/tres-premios-para-mama-de-un-survivor/ Muchos besos!

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    1. Guau!! Muchas gracias, menudo subidón me ha entrado al leerlo!! xD

      En cuanto pueda, contesto a las preguntas y nomino.

      Muchos besos!!

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